Con casi un millón de unidades fabricadas del Volkswagen Tiguan en los doce años de vida que acumula entre las dos generaciones, un auténtico éxito que la marca alemana quiere seguir aumentando ventas con el facelift que acaba de presentar, y continuar siendo líder de la categoría de los SUV compactos.
El Tiguan presenta nuevos faros delanteros, ahora más estrechos, siguiendo la estela de la octava generación del Golf, con una nueva firma luminosa de LED que se integran visualmente con los nuevos listones más finos de la parrilla. El bomper también cuenta con un nuevo diseño y apliques decorativos en forma de “C”, con el color de la carrocería y en negro con el paquete deportivo R-Line.
Por detrás, Volkswagen mantiene la forma original de los grupos ópticos, aunque estrena nueva firma luminosa gracias a los LED de serie. Se ha reubicado el nombre del modelo, ahora bajo el logo y el diseño de la parte inferior del bomper, con falsas molduras que simulan los escapes integrados.
Por dentro, también presenta importantes novedades: el cuadro de instrumentos digital el cual puede llegar hasta las 10 pulgadas como opción, el volante cuenta con un nuevo diseño, más deportivo y sus mandos multifunción ahora son táctiles. La pantalla táctil de la consola central es nueva, de 6,5 pulgadas de serie, al igual que los mandos del aire acondicionado.