La icónica marca británica de todoterrenos, Land Rover, está atravesando por una difícil situación con su modelo Land Rover Discovery. La demanda ha caído considerablemente y su producción en Eslovaquia ha sido reducida a niveles nunca antes vistos. Esto ha llevado a la marca a estudiar seriamente el futuro del Discovery, el cual está en un punto muy incierto.
A pesar de las dificultades, Land Rover sigue adelante con sus planes de electrificación de sus modelos, comenzando por la nueva generación del Range Rover más lujoso y exquisito de todos los tiempos. Este será el primer modelo de la marca en tener cero emisiones, y se espera que la estrategia continúe con el Range Rover Sport.
Por otro lado, el Range Rover Sport ha demostrado ser uno de los modelos más populares de la marca en la última entrega, erigiéndose como uno de los más fabricados. El SUV deportivo ha sido todo un éxito de ventas desde su lanzamiento, llenando los libros de pedidos y obligando al fabricante a aumentar su producción. Sin embargo, este éxito comercial del Range Rover Sport ha afectado al Land Rover Discovery, que también era una referencia en el mercado.
El Land Rover Discovery ha sido una auténtica referencia entre los todoterrenos de la firma, acumulando tres generaciones y casi 34 años a la venta, que cumplirá a principios de octubre, incluyendo también los siete años de esta última generación. A finales de los años 90, superó las 20.000 unidades vendidas en el Viejo Continente en 1997, 1999 y 2005. No obstante, desde 2008, las ventas anuales han disminuido y, en los últimos años, las ventas se han reducido considerablemente. En 2022, terminó el año pasado con solo 1.924 unidades en el último trimestre del año. Esto supone poco más de 1.500 unidades menos que en 2021, según los datos de «Carsales». Mientras, la producción del Range Rover Sport no da abasto a satisfacer la demanda y los pedidos que se hallan en lista de espera.
La supervivencia del Land Rover Discovery se complica seriamente, y la marca está estudiando seriamente qué hacer con este modelo. Hay partidarios de que este modelo sea eliminado de la gama, al considerar que el Range Rover Sport ya está demostrando que la agonía será más lenta, y que un nuevo modelo será un desperdicio de ingentes recursos que se pueden destinar a otros o al desarrollo de nuevas tecnologías. El futuro de un icono como el Land Rover Discovery está en entredicho a día de hoy.