La llegada de las baterías de estado sólido al Dodge Charger Daytona en 2026 ha generado un revuelo en el mundo de los vehículos eléctricos (EV), y no es para menos. Con la promesa de mejorar la autonomía, el rendimiento y la eficiencia de los EVs, estas nuevas baterías parecen ser el futuro. Sin embargo, aunque la noticia es emocionante, hay un detalle importante: estas baterías se instalarán inicialmente en una flota de prototipos para ser probadas en condiciones reales, lo que indica que aún faltan algunos pasos antes de que los conductores puedan disfrutar de ellas en las calles.
Un paso hacia la electrificación con baterías de estado sólido
Stellantis, la empresa matriz de Dodge, ha unido fuerzas con Factorial, una compañía pionera en baterías de estado sólido, para desarrollar una nueva era de vehículos eléctricos más eficientes y duraderos. Estas baterías ofrecerán una densidad energética superior a los 390 Wh/kg, superando a las tradicionales de iones de litio que dominan el mercado actual.
Ventajas de las baterías de estado sólido
Las baterías de estado sólido ofrecen varias ventajas significativas sobre sus homólogas de iones de litio, como:
- Mayor densidad energética: lo que se traduce en una mayor autonomía por carga.
- Reducción de peso: contribuyendo a mejorar el rendimiento general del vehículo.
- Mejora del rendimiento: permite tiempos de carga más rápidos y un mejor rendimiento en condiciones extremas.
- Posibilidad de reducción de costos a largo plazo: el desarrollo continuo podría llevar a que el costo total del vehículo sea más bajo que el de los EVs actuales.
Estas mejoras no solo podrían hacer que los autos eléctricos sean más competitivos frente a los de combustión interna, sino que también los harán más accesibles al público en general, gracias a los posibles ahorros en costos de producción.
¿Cuándo veremos estas baterías en acción?
Aunque 2026 es el año en el que se espera ver estas baterías en el Charger Daytona, debemos aclarar que las primeras unidades equipadas con esta tecnología serán parte de una flota de demostración. Estos prototipos estarán diseñados para validar la tecnología en situaciones de conducción reales. La finalidad es evaluar su rendimiento y asegurarse de que estas baterías cumplen con las altas expectativas.
En este contexto, Stellantis ha sido clara al señalar que se trata de un paso crucial en su estrategia de electrificación. El objetivo final es introducir estas baterías de estado sólido en su plataforma STLA Large, una arquitectura pensada para vehículos eléctricos de alto rendimiento.
La inversión de Stellantis en Factorial: Una apuesta de futuro
En 2021, Stellantis invirtió 75 millones de dólares en Factorial, una señal clara de su compromiso con esta tecnología. Según Ned Curic, Director de Ingeniería y Tecnología de Stellantis, esta inversión es un reflejo del interés de la empresa en garantizar que sus vehículos eléctricos sean líderes en autonomía, rendimiento y tiempos de carga. Al integrar las baterías de Factorial en la plataforma STLA, Stellantis busca mejorar la experiencia del cliente con vehículos más potentes y eficientes.
¿Qué significa esto para los conductores?
Para los usuarios, esto significa que, si todo sale como se espera, en unos años podrían tener acceso a vehículos eléctricoscon mayor autonomía, menores tiempos de carga y un rendimiento superior al de los actuales modelos. En pocas palabras, estos avances pueden eliminar algunas de las principales barreras que hoy enfrentan los consumidores al considerar cambiarse a un EV.
Innovación aerodinámica en el horizonte: El túnel de viento de Stellantis
Otro anuncio importante de Stellantis fue la apertura de un túnel de viento de alta tecnología en su centro de investigación y desarrollo en Auburn Hills, Michigan. Este túnel está diseñado específicamente para mejorar la aerodinámica de los vehículos eléctricos, con el fin de optimizar la eficiencia energética.
¿Por qué es importante la aerodinámica en los vehículos eléctricos?
La aerodinámica es fundamental en los EVs porque ayuda a reducir la resistencia del aire, lo que se traduce en una mayor autonomía o, en algunos casos, la posibilidad de utilizar baterías más pequeñas y económicas sin sacrificar el rendimiento.
El nuevo túnel de viento de Stellantis cuenta con tecnología de “plano de tierra en movimiento”, lo que permite medir con mayor precisión la resistencia aerodinámica de las ruedas y los neumáticos. Según la automotriz, las ruedas pueden representar hasta el 10% de la resistencia aerodinámica total, por lo que reducir esta cifra tiene un impacto directo en la eficiencia del vehículo.
Además, este túnel permite realizar cambios en la distancia entre ejes y en las pruebas de pista en cuestión de minutos, algo que normalmente tomaría horas en un túnel de viento convencional. Esto no solo acelera el proceso de desarrollo, sino que también optimiza el diseño aerodinámico en tiempo récord.
Enfoque en vehículos de gran tamaño
Stellantis ha dejado claro que este túnel de viento está diseñado pensando en los vehículos de gran tamaño. Dado que el mercado estadounidense está dominado por SUVs y camionetas, la capacidad de mejorar la eficiencia de estos vehículos es clave para la estrategia de electrificación de la marca.
¿Qué podemos esperar del Dodge Charger Daytona con baterías de estado sólido?
Si bien la noticia de que el Dodge Charger Daytona recibirá baterías de estado sólido en 2026 es emocionante, debemos ser pacientes. Los primeros modelos serán prototipos y el objetivo principal será probar la viabilidad de esta tecnología en el mundo real. Sin embargo, si los resultados son positivos, podríamos estar frente a una verdadera revolución en la industria de los vehículos eléctricos.
Un paso más hacia la electrificación total
Con las baterías de estado sólido como la nueva frontera de la tecnología EV y un enfoque en la aerodinámica, Stellantis está tomando pasos firmes para posicionarse como uno de los líderes del mercado de vehículos eléctricos. A medida que la industria avanza, el Dodge Charger Daytona equipado con estas nuevas baterías podría convertirse en un símbolo del futuro de la movilidad.
Conclusión
El futuro de los vehículos eléctricos es prometedor, y las baterías de estado sólido juegan un papel crucial en este avance. A medida que Stellantis y Factorial continúan desarrollando esta tecnología, el Charger Daytona de 2026 promete ser una prueba de lo que está por venir. No obstante, la verdadera revolución se dará cuando estas baterías lleguen al mercado de consumo, ofreciendo a los conductores vehículos más eficientes, con mayor autonomía y menores tiempos de carga.
Los vehículos eléctricos del futuro no solo serán más rápidos y potentes, sino que también serán más inteligentes y eficientes, gracias a la innovación tecnológica que estamos presenciando hoy.