En la jungla de concreto que constituyen nuestras ciudades, existen varias formas de organizar y controlar el flujo de tráfico. Una de ellas, a menudo infravalorada, es la glorieta. Las glorietas se presentan como una eficaz solución a la congestión vial, siempre y cuando se comprendan bien sus reglas y se respeten las prioridades de paso. En este artículo, vamos a explorar cómo debemos circular en las glorietas de México para garantizar una movilidad segura y eficiente.
¿Por qué son Importantes las Glorietas?
Es común que muchos conductores vean las glorietas como un enigma o, peor aún, como una fuente de percances vehiculares. Sin embargo, estas estructuras son excelentes herramientas de movilidad cuando se utilizan de manera correcta. Las glorietas favorecen un tránsito fluido y disminuyen la necesidad de semáforos, reduciendo así la cantidad de tiempo que los vehículos pasan detenidos y, por ende, disminuyendo la emisión de gases contaminantes. La eficiencia de las glorietas, no obstante, depende en gran medida del comportamiento de los automovilistas.
Prioridad de Paso en las Glorietas: Una Regla Simple
Un aspecto fundamental a entender es la prioridad de paso en las glorietas. En este tipo de intersecciones, la regla es simple: el primer vehículo que entra en la glorieta tiene derecho de paso. Olvidémonos de la norma “la derecha es continua”, pues en una glorieta esta no aplica. Los vehículos que se aproximan deben ceder el paso a aquellos que ya están circulando dentro de la glorieta.
¿Cómo Circular en una Glorieta? Tres Momentos Clave
Para circular correctamente en una glorieta, es importante considerar tres momentos clave: la entrada, la circulación interior y la salida.
Entrada
Cuando nos aproximamos a una glorieta, debemos observar hacia la izquierda y proceder con paciencia. Dependiendo del flujo de tráfico, es posible que debamos reducir la velocidad, incluso hasta detenernos por completo. Los vehículos que ya están circulando dentro de la glorieta tienen prioridad. Para incorporarnos, debemos hacerlo desde el carril derecho siempre que sea posible y esté libre.
Circulación Interior
Una vez dentro de la glorieta, si pretendemos tomar las primeras salidas, es recomendable usar el carril exterior. Sin embargo, para las últimas salidas o cambios de sentido, sobre todo en glorietas con mucho tráfico, es aconsejable usar los carril interior y buscar el carril exterior progresivamente antes de llegar a la salida.
Salida
Si el tráfico es intenso y no podemos cambiar a tiempo al carril exterior, lo más seguro es dar otra vuelta a la glorieta para buscar una colocación adecuada. Al aproximarnos a la salida, debemos situarnos en el carril exterior. No está permitido salir de la glorieta desde los carriles interiores, ya que esto podría causar accidentes.
Conclusión
Las glorietas, a pesar de su aparente simplicidad, pueden resultar desafiantes para los conductores que no están familiarizados con sus normas de uso. Sin embargo, una vez que entendemos cómo funcionan y cómo debemos circular en ellas, las glorietas se convierten en una eficaz solución para el tráfico, facilitando una circulación más fluida y segura. La clave para una convivencia armónica en las glorietas está en el respeto por las normas y la prioridad de paso. Recordemos que, en última instancia, un buen uso de las vialidades no sólo beneficia nuestra propia seguridad, sino también la de los demás conductores.