La industria automotriz está en constante cambio, y el papel de China en la electrificación es cada vez más dominante. Stellantis, uno de los gigantes del sector, parece haber entendido que, en lugar de competir contra los fabricantes chinos, la mejor estrategia es unirse a ellos. Ahora, según reportes de la web francesa L’Argus, el grupo automotriz europeo está en negociaciones con BYD para que la compañía china se convierta en su proveedor de baterías de fosfato de hierro y litio (LFP). ¿!– /wp:paragraph –>
Pero, ¿cómo impactará esta posible alianza en el mercado de autos eléctricos? ¿Realmente las baterías LFP de BYDpueden marcar la diferencia en costos y autonomía? Vamos a analizarlo en profundidad.

El desafío de Stellantis: Autos eléctricos accesibles
Desde que el mercado de vehículos eléctricos (EVs) empezó a crecer en Europa, el principal obstáculo ha sido el precio. A pesar de los incentivos gubernamentales, muchas personas todavía consideran que los EVs son demasiado caros en comparación con sus equivalentes de combustión.
Stellantis ya había dado un paso importante con el lanzamiento del Citroën ë-C3 y el Fiat Grande Panda, modelos diseñados para ser las opciones más asequibles dentro de su gama de eléctricos. Sin embargo, el problema es que, a pesar de sus esfuerzos, estos autos siguen estando por encima de los 20.000 euros.
Actualmente, estos vehículos montan baterías de 44 kWh suministradas por SVOLT, una empresa china especializada en celdas de iones de litio. Sin embargo, sus precios aún no logran romper la barrera psicológica de los 20.000 euros, quedando en:
- Citroën ë-C3: Desde 23.300 euros
- Fiat Grande Panda: Desde 24.900 euros
Para Stellantis, la solución parece ser cambiar de proveedor de baterías y optar por una alternativa más económica: las baterías LFP de BYD.

¿Por qué Stellantis quiere baterías de BYD?
El gigante chino BYD no solo es un fabricante de autos eléctricos, sino también uno de los líderes mundiales en producción de baterías. Su tecnología de fosfato de hierro y litio (LFP) es una alternativa más barata que las baterías de iones de litio convencionales y, aunque tienen una menor densidad energética, son más duraderas y seguras.
Ventajas de las baterías LFP de BYD:
✅ Menor costo de producción
✅ Mayor vida útil (pueden soportar más ciclos de carga)
✅ Menor degradación con el tiempo
✅ Mayor seguridad ante sobrecalentamiento o incendios
El gran atractivo de las baterías LFP de BYD es que, al ser más económicas, permitirían que los Citroën ë-C3 y Fiat Grande Panda bajen su precio final y compitan con modelos asequibles como el Leapmotor T03 y el Dacia Spring.
¿Qué cambia con las baterías de BYD?
- Capacidad estimada: 30-35 kWh
- Autonomía estimada: 200-250 km
- Reducción de precio: Por debajo de los 20.000 euros
Si bien la autonomía sería menor que la de las baterías actuales de 44 kWh (320 km), se compensa con un precio más competitivo, lo que haría que estos vehículos sean una opción atractiva para quienes buscan un auto eléctrico asequiblepara la ciudad.

El impacto en el mercado europeo de EVs
Este movimiento estratégico de Stellantis no solo beneficiaría a sus propios modelos, sino que también podría cambiar las reglas del juego en el mercado europeo. Con un EV por debajo de los 20.000 euros, la empresa se acercaría al objetivo de hacer la movilidad eléctrica más accesible para el público en general.
Competencia directa con los citycars eléctricos más baratos
Actualmente, los EVs más baratos en Europa son:
Modelo | Precio inicial (€) | Autonomía (km) |
---|---|---|
Dacia Spring | 17.000 | 230 |
Leapmotor T03 | 19.000 | 280 |
Citroën ë-C3 | 23.300 | 320 |
Fiat Grande Panda | 24.900 | 320 |
Si Stellantis logra reducir el precio del ë-C3 y el Grande Panda hasta los 19.900 euros o menos, estaríamos hablando de los primeros EVs europeos accesibles, capaces de competir directamente con opciones chinas como el Dacia Spring o el Leapmotor T03.
¿Qué gana BYD con este acuerdo?
Para BYD, cerrar un contrato con Stellantis significaría consolidarse como un proveedor clave de baterías en Europa. Actualmente, la empresa china ya vende sus propios modelos eléctricos en la región, como el BYD Dolphin y el BYD Seal, pero esta asociación le permitiría expandir su influencia dentro de las marcas tradicionales.
Además, esto fortalecería su presencia en el mercado global de baterías, un sector en el que compite con otros gigantes como CATL, LG Energy Solution y Panasonic.

Conclusión: Un paso clave hacia los EVs económicos
La posible alianza entre BYD y Stellantis es una jugada inteligente para ambas compañías. Stellantis logra bajar el costo de sus autos eléctricos para competir con los fabricantes chinos, mientras que BYD expande su presencia en el mercado europeo.
Si se concreta el acuerdo, los Citroën ë-C3 y Fiat Grande Panda podrían convertirse en los EVs más accesibles de Europa, un paso clave para que la electrificación llegue a un público más amplio.
Ahora la gran pregunta es: ¿aceptará Stellantis la reducción de autonomía a cambio de un precio más competitivo?Todo indica que la estrategia está en marcha, y pronto podríamos ver una nueva era de autos eléctricos más asequibles en Europa.