El fabricante alemán de tecnología automotriz y autopartes Bosch conmemora la creación de una de las ideas que mayor impacto han tenido en la seguridad activa del vehículo.
Se trata de los frenos ABS, un desarrollo tecnológico que Bosch introdujo en 1978 y que desde ese momento comenzó a salvar vidas, a tal punto que prontamente se volvió en equipamiento estándar en la mayoría de las marcas de vehículos del mundo.
Los sistemas de seguridad activa ayudan a evitar accidentes y apoyan al conductor de manera eficaz para llegar hasta su destino. Sucede que todo conductor de vehículo se puede ver en la situación de tener que hacer una frenada a fondo, donde es decisivo detenerse. Pero al hacerlo sobre calzadas mojadas o lisas las ruedas del vehículo se pueden bloquear y perdiéndose el control del vehículo porque éste patina recto hacia el obstáculo.
El Sistema Antibloqueo de Frenos de Bosch evita el bloqueo de las ruedas. Si una rueda llega a bloquearse, el este sistema interviene de inmediato. El ABS puede regular individualmente, en milésimas de segundos, la presión de frenado en cada rueda.
De esta manera garantiza maniobrabilidad y estabilidad, con la distancia de frenado más corta posible. Así, el conductor se encuentra en todo momento en capacidad de esquivar un obstáculo.
Con el tiempo el ABS ha venido evolucionando hacia el Control Electrónico de Estabilidad (ESC) y de Tracción (ASR), además del de Descenso Controlado y del de Ayuda a la Arrancada en Pendientes, entre otros.
En virtud de la resolución 3752 de 2015, todo vehículo nuevo que se quiera comercializar debe venir equipado con esta tecnología, la cual tiene el respaldo de Innovateq, representante de Bosch desde 1999, con productos como pastillas, discos y líquido de frenos que cumplen con las normas técnicas y certificaciones exigidas por la normatividad colombiana e internacional para la comercialización.