El macabro aporte de las motocicletas a las escandalosas cifras de accidentalidad, morbilidad y mortandad en Colombia requiere rápida acción de parte de los entes del Estado, de las marcas que concurren en el mercado y, claro está, de parte de los mismos usuarios.
Pero más allá de la efectividad de las campañas de prevención y de la posible acción del Estado por ampliar el alcance de la resolución 3752 del 2015 a las motocicletas, existe una clara deficiencia en el equipamiento de estos vehículos.
Se trata de la ausencia del Sistema Antibloqueo de Frenos en la gran mayoría de los productos que llegan a manos de los motociclistas de menores recursos.
Una tecnología al servicio de la seguridad
Teniendo en cuenta los lineamientos de la normativa Euro 4, las compañías fabricantes de motocicletas han puesto sus ojos en la implementación de sistemas de seguridad para la operación de este tipo de vehículos, como el ABS.
La función del sistema ABS en una motocicleta no dista del principio de funcionamiento del aplicado a un automóvil, el cual básicamente es evitar el bloqueo de los neumáticos durante una frenada, ya que cuando esto sucede puede generar la pérdida de control del vehículo.
Así, el ABS en una motocicleta es uno de los componentes de mayor importancia, si se tienen en cuenta la exposición de sus pasajeros y las consecuencias de un accidente.
Sin embargo, el equipamiento de este sistema en motocicletas ha resultado menor si se compara con el crecimiento de la tecnología en vehículos de cuatro ruedas. La implementación data de 1988 y el primer paso lo dio el fabricante alemán BMW y posteriormente se vio replicado por el fabricante Honda en 2004.
No obstante, a tres décadas de su entrada en uso, aún queda mucho camino por recorrer porque actualmente solo una de cada cuatro motocicletas en modelos superiores a 250 cc cuenta con el sistema instalado en fábrica y, en motocicletas de menor cilindraje, es muy inferior el número equipado.
Para tal efecto, el pasado 16 de junio de 2018 en Argentina, se realizó un evento de la campaña #StoptheCrash de LatinNCAP. Se trató del lanzamiento para América Latina de esta iniciativa que promueve el equipamiento de las últimas tecnologías de seguridad para la prevención de siniestros en todo tipo de vehículos, incluyendo los frenos ABS en motocicletas, que tanto reducen el riesgo de caída y la distancia de detención.
Fabricantes de componentes como Bosh, tienen a su disposición el sistema ABS el cual es especialmente diseñado para las características de frenado de vehículos de dos ruedas y puede ser adaptado a una amplia gama de modelos, dada la evolución del sistema.
Hoy día se ven con alguna frecuencia los sistemas integrales de frenado, que en algo ayudan a la seguridad, pero que nunca reemplazan el ABS.
Obligatorio en Europa
El ABS para motocicletas consta de un sensor en cada rueda a fin de monitorear la velocidad de rotación. Al ser detectada una condición de posible bloqueo, la presión del sistema varía para garantizar el control tanto en línea recta como en curva.
Inicialmente el sistema fue implementado en motocicletas de alta gama, motivo por el cual hasta hace poco era concebido como un equipo lejano para otros segmentos. Sin embargo, hoy día se puede identificar su disponibilidad y uso desde las scooter de 125 cc.
Esto sucede porque actualmente el sistema se concibe como un requisito de homologación obligatoria para las motocicletas nuevas de 125 cc y superiores fabricadas en Europa desde enero de 2017, sumado a otras normativas que lo exigen para vehículos entre 51 cc y 125 cc.
Sin embargo, la resolución 3752 del 2015 del Ministerio de Transporte, excluyó a las motocicletas de estos elementos de seguridad activa. Pero, a futuro, debería implementarse un reglamento técnico de seguridad activa y pasiva.
¿ABS para motos en Colombia?
Solamente a través de la regulación estatal las ensambladoras se verán en la obligación de incorporar en sus líneas de producción el equipamiento técnico del sistema ABS y, los importadores, incluirlo en la configuración de sus pedidos.
Actualmente se comercializan en versiones de motocicletas con y sin ABS sin diferencia significativa en cuanto al precio final al comprador.
Las necesidades de los consumidores sumados a los lineamientos que buscan la obligatoriedad de la implementación del sistema ABS en las motocicletas nuevas ha permitido que líneas de ensamble nacional como la Pulsar de Bajaj, NMax de Yamaha, CBR 250R de Honda y recientemente TVS Apache vayan a la vanguardia en esta iniciativa, lo cual a su vez permite apreciar que la variación porcentual del valor de una motocicleta con sistema ABS de fábrica versus una sin el sistema no resulta tan significativa como podría suponerse:
El creciente número de motocicletas con ABS de ensamble nacional, sumado a la demanda de esta tecnología y las pocas unidades disponibles sugiere entonces que el consumidor ha volcado su esfuerzo a adquirirlas con esta tecnología. Solamente hace falta regulación para que se convierta en un estándar.