¿Puede un vehículo conquistar visualmente a primera vista y decepcionar al abrir su maletero? El nuevo Mazda CX-6e parece ser la viva prueba de ello. Y aunque su diseño aerodinámico, su tecnología de vanguardia y sus versiones electrificadas hacen que el corazón se acelere, hay un pequeño gran detalle que no podemos ignorar: un maletero de solo 350 litros.
Pero antes de juzgarlo por ese “pecado capital” en el segmento SUV, vamos a descubrir si el CX-6e tiene más de lo que aparenta. Quédate hasta el final, porque lo que vamos a revelar podría cambiar tu percepción de este modelo por completo.

Un SUV con espíritu futurista y alma japonesa
El Mazda CX-6e es mucho más que un SUV eléctrico. Es una apuesta clara del fabricante japonés por dejar una huella imborrable en la nueva era de la movilidad sostenible. Pero ojo, que no lo ha hecho solo. Este vehículo nace de la alianza entre Mazda y el grupo chino Changan, y utiliza la plataforma modular EPA1, la misma que da vida al Deepal S07. Esto ya nos dice mucho sobre su ambición: competir en serio.
Las líneas del CX-6e están cargadas de fluidez y dinamismo, con una silueta que rompe el molde tradicional de los SUV eléctricos. El secreto de su presencia visual está en su frontal musculoso pero aerodinámico, resuelto con nueve conductos de aire estratégicamente ubicados para mejorar el flujo sin traicionar la estética “muy Mazda”.
Uno de los puntos más llamativos es su pilar D hueco, una innovación que no solo aporta diseño, sino eficiencia. Mientras tanto, las icónicas “alas de ángel” se mantienen como guiño a la identidad visual de la marca.
Dimensiones que imponen respeto
Para que te hagas una idea del tamaño del CX-6e, estas son sus medidas:
- Largo: 4.850 milímetros
- Ancho: 1.935 milímetros
- Alto: 1.620 milímetros
- Distancia entre ejes: 2.902 milímetros
Estas cifras lo posicionan justo en el segmento D-SUV, donde Mazda pretende plantar cara a modelos como el Tesla Model Y o el GAC Honda P7. Pero lo que realmente llama la atención son sus llantas de 21 pulgadas, con una profundidad de 48,5 mm. Sí, ¡más que un Audi RS6 o un Porsche 911 GT3!
Y si te gustan los detalles visuales, te encantará saber que los radios tienen cortes que, al girar, crean un efecto de pétalos en movimiento. No es solo un carro, es una escultura rodante.
Un diseño exterior que enamora (literalmente)
Pocas marcas se atreven a innovar tanto en colores y acabados como lo ha hecho Mazda con el CX-6e. Este SUV no se conforma con lo habitual. Su paleta de ocho colores incluye dos nuevas incorporaciones, entre ellas un púrpura tornasolado que cambia sutilmente con la luz del sol. Pura poesía visual.
En la parte trasera, las curvas suaves se integran con las luces LED inspiradas en las ya mencionadas alas de ángel. Aquí no hay líneas rectas ni elementos toscos; todo fluye con una armonía que recuerda al diseño de interiores japoneses.
¿Y qué pasa con los espejos retrovisores? Puedes elegir: los tradicionales o unos más modernos con cámaras multimedia integradas. Mazda deja que seas tú quien decida cuánta tecnología quiere llevar en su día a día.

Un interior que parece una sala de estar japonesa
Cuando abres la puerta del CX-6e, no entras en un vehículo: entras en una experiencia. El diseño interior ha sido claramente influenciado por la filosofía japonesa del minimalismo elegante. Todo está pensado para crear un ambiente envolvente, cálido y sobrio.
Puedes elegir entre una tapicería en morado oscuro que transmite sofisticación o un relajante blanco ostra, que transforma la cabina en un pequeño santuario sobre ruedas.
Y si hablamos de comodidad, los asientos “gravedad cero” se llevan todos los aplausos. Inspirados en la postura ideal para el cuerpo humano, ofrecen soporte lumbar y cervical perfecto, especialmente útil para viajes largos. Además, todos los asientos tienen calefacción y ventilación. ¿Ya te estás imaginando ahí?
Seis pantallas y una experiencia digital al límite
El CX-6e no se queda corto en cuanto a tecnología. De hecho, es uno de los SUV eléctricos más avanzados del mercado. Su interior integra seis pantallas que redefinen lo que significa estar “conectado” en un vehículo.
Aquí algunos de sus puntos más destacados:
- Pantalla central de 26,45 pulgadas en resolución 5K
- HUD de realidad aumentada de 100 pulgadas
- Espejos con pantalla integrada en lugar de retrovisores físicos
- Pantalla de control trasera para pasajeros
Todo este sistema corre gracias a un chip de 4 nanómetros, que garantiza fluidez, velocidad y capacidad de respuesta inmediata. Y como si fuera poco, el sistema de sonido está firmado por Dolby Atmos y cuenta con 23 altavocesdistribuidos estratégicamente para una inmersión total.

Lo bueno, lo malo y lo polémico: su maletero
Hasta aquí todo parece sacado de un sueño, ¿verdad? Pero como todo sueño tiene su despertar, el CX-6e también tiene un talón de Aquiles: su capacidad de carga.
Con solo 350 litros de maletero trasero, este SUV se queda corto frente a otros competidores del segmento. ¿Un Model Y? Más de 850 litros. ¿Un Skoda Enyaq? Más de 585 litros. Aquí Mazda pierde claramente la batalla del espacio.
Es cierto que incorpora un maletero delantero (frunk) de 126 litros, pero incluso sumando ambos no alcanza el estándar del mercado actual. ¿Puede esto frenar a los compradores? Dependerá de si buscan funcionalidad o diseño como prioridad.
El corazón eléctrico del Mazda CX-6e: ¿rendimiento o eficiencia?
El Mazda CX-6e no solo quiere seducir por fuera. También tiene argumentos técnicos que lo colocan como un contendiente serio en el segmento de los SUV eléctricos, y la clave está en su doble propuesta mecánica. Sí, Mazda ha optado por lanzar dos variantes electrificadas distintas, cada una pensada para diferentes perfiles de usuario.
La primera es una versión 100% eléctrica, mientras que la segunda incorpora un extensor de autonomía que permite recorrer distancias mucho mayores sin depender exclusivamente de la infraestructura de recarga.
Versión eléctrica pura: hasta 600 km con batería NCM
Mazda pone sobre la mesa dos configuraciones de batería para la versión eléctrica pura:
- Batería LFP de 68,8 kWh (versión base)
- Batería NCM de 80 kWh (versión superior)
La primera opción está claramente orientada a un público urbano o con desplazamientos diarios cortos, ofreciendo una autonomía estimada en CLTC que, si bien no ha sido detallada con precisión para esta versión, rondaría los 450 a 500 km.
Pero la joya de la corona es la batería NCM, que promete más de 600 km de autonomía bajo el ciclo chino CLTC. Esto equivale a unos 520-540 km reales en uso mixto, lo que lo coloca en la misma liga que SUV premium como el Tesla Model Y Long Range o el Hyundai Ioniq 5.
El uso de química NCM (níquel, cobalto y manganeso) le permite mantener una mayor densidad energética, lo que se traduce en una mejor autonomía sin sacrificar demasiado el peso total del vehículo.

La opción más versátil: eléctrico con extensor de autonomía
Mazda, consciente de las limitaciones de infraestructura en algunos mercados —especialmente en regiones rurales o menos desarrolladas—, ofrece también una versión del CX-6e con extensor de autonomía. Esta variante no es nueva en la industria, pero sí poco común en modelos tan modernos.
Su configuración es la siguiente:
- Batería de 31,7 kWh, que proporciona unos 200 km de autonomía eléctrica pura (CLTC)
- Motor térmico como generador que actúa solo cuando se agota la carga
Este formato híbrido en serie es ideal para quienes desean lo mejor de dos mundos: pueden circular con cero emisiones en trayectos cortos, pero no tienen que preocuparse por quedarse sin carga en viajes largos. Según Mazda, esta versión puede superar los 1.000 km de autonomía total al combinar ambas fuentes de energía.
Esta propuesta suena especialmente interesante para el mercado europeo, donde todavía hay cierta incertidumbre con la infraestructura de recarga en rutas secundarias.
¿Y qué hay de la carga?
Aunque Mazda no ha dado todos los detalles sobre los tiempos de carga, se espera que:
- La versión eléctrica pura cuente con carga rápida en corriente continua (DC) de al menos 100 kW, lo que permitiría pasar del 10% al 80% en menos de 40 minutos.
- La versión con extensor de autonomía podría tener una potencia de carga más modesta, enfocándose más en recarga doméstica o en puntos de baja-media potencia.
El tipo de conector será seguramente el estándar CCS Combo 2, compatible con la mayoría de cargadores europeos.
Comparativa directa: ¿puede el CX-6e con los grandes del sector?
Veamos cómo se posiciona el Mazda CX-6e frente a sus principales rivales. En la tabla comparativa a continuación, analizamos autonomía, batería y capacidad de maletero:
Modelo | Autonomía real estimada | Batería (kWh) | Maletero | Precio base (€ aprox.) |
---|---|---|---|---|
Mazda CX-6e (eléctrico) | 520 km | 80 | 350 L (+126L frunk) | 30.000 |
Tesla Model Y Long Range | 533 km | 75 | 854 L | 45.000 |
Hyundai Ioniq 5 | 480 km | 77,4 | 527 L | 41.000 |
Ford Mustang Mach-E SR | 440 km | 70 | 402 L | 42.000 |
Como se puede ver, el CX-6e es competitivo en autonomía y en precio, pero queda muy rezagado en capacidad de maletero. Este será sin duda el gran “pero” que tendrán en cuenta muchos compradores potenciales.
Tecnología de conducción y sistemas ADAS
Pero no todo es motor y batería. El Mazda CX-6e también destaca por ofrecer una amplia suite de sistemas de asistencia a la conducción, incluyendo:
- Navegación autónoma en autopista: conducción semiautónoma con mantenimiento de carril y distancia adaptativa.
- Estacionamiento automático con o sin conductor: el auto puede aparcarse solo, incluso estando tú fuera, usando la app del teléfono.
- Reconocimiento de señales de tráfico y asistente de cambio de carril activo
- Sistema de visión 360º con cámaras HD
Gracias a su potente chip de 4 nanómetros, todos los sistemas ADAS funcionan con precisión quirúrgica, minimizando falsos positivos o retrasos en la respuesta.

Asientos “gravedad cero”: un spa rodante
Si algo merece una ovación dentro del Mazda CX-6e, son sus asientos “gravedad cero”. Inspirados en estudios de ergonomía de la NASA, estos asientos distribuyen el peso del cuerpo de forma uniforme para reducir la fatiga en trayectos largos.
¿Qué los hace especiales?
- Apoyo lumbar y cervical optimizado
- Ángulo de respaldo calibrado para mantener la columna en posición neutra
- Calefacción y ventilación individualizadas para cada asiento
- Revestimientos premium en colores sobrios y sofisticados
Además, cuentan con memorias de posición y ajuste eléctrico en múltiples direcciones, lo que permite encontrar siempre la postura perfecta, incluso para conductores de talla grande o personas con movilidad reducida.
Experiencia sensorial: Dolby Atmos y ambiente premium
Mazda no solo ha cuidado la estética. El sistema de sonido firmado por Dolby Atmos con 23 altavoces convierte cada trayecto en un concierto privado. Gracias al chip de 4 nanómetros, el sistema es capaz de ajustar en tiempo real el ecualizador según el número de ocupantes o el tipo de contenido.
Y por si fuera poco, los paneles interiores integran iluminación ambiental regulable, que cambia en función del modo de conducción, la hora del día o incluso el estado de ánimo del conductor (sí, hay sensores biométricos opcionales que detectan estrés o fatiga).
Espacio para pasajeros: bien aprovechado, aunque limitado atrás
En cuanto al espacio interior, la distancia entre ejes de 2.902 mm ofrece una cabina muy generosa para los ocupantes delanteros y traseros. Las plazas traseras tienen buen espacio para piernas y cabeza, incluso para adultos altos.
Sin embargo, al estar diseñado con una línea de techo algo descendente para mejorar la aerodinámica, algunos usuarios podrían encontrar limitada la visibilidad lateral o la sensación de amplitud en la segunda fila. Eso sí, el acabado minimalista ayuda a que el entorno no se sienta recargado ni agobiante.
Y aunque ya lo dijimos antes, vale repetirlo: el maletero trasero de 350 litros es su punto débil. Para familias con niños o para quien necesita transportar equipaje voluminoso con frecuencia, este podría ser el factor decisivo para descartarlo.
Afortunadamente, el maletero delantero (frunk) de 126 litros sirve como compensación parcial, ideal para mochilas, bolsas de la compra o el cable de carga.

Una cabina inteligente que anticipa tus movimientos
El CX-6e no solo es digital. Es inteligente. ¿Qué significa eso?
- Reconoce el conductor por su rostro o huella dactilar
- Ajusta automáticamente los espejos, el asiento y la climatización según el perfil cargado
- Aprende tus rutinas y recomienda rutas, estaciones de carga o playlist favoritos
Además, cuenta con un asistente por voz mejorado, capaz de interactuar con un lenguaje natural. Puedes pedirle “pon música tranquila” o “llévame al restaurante japonés más cercano”, y obtendrás una respuesta precisa y adaptada al contexto.
Todo esto crea una experiencia de usuario fluida, intuitiva y sin fricciones. Justo lo que uno espera de un SUV premium en pleno 2025.

¿Por qué el maletero es tan pequeño?
La gran incógnita del Mazda CX-6e no es su tecnología ni su diseño, sino por qué un SUV de este tamaño tiene un maletero tan limitado.
La respuesta está en la arquitectura de su plataforma compartida con el Deepal S07. Al estar diseñada para maximizar la batería y el espacio interior de pasajeros, el volumen de carga se ha sacrificado. Además, al incorporar hasta 20 compartimentos pequeños en el interior, Mazda ha redistribuido el espacio útil de manera no convencional.
Esto podría no ser un problema para quienes viajan ligeros o viven en ciudad, pero sí para familias o viajeros frecuentes. De hecho, ya hay usuarios en foros especializados debatiendo sobre si es un error de diseño o una apuesta intencional por el estilo sobre la funcionalidad.